la jugada puede salir mal (o muy bien)
Vender tu casa y comprar otra en la misma operación es como intentar cambiar de asiento en un coche en marcha.
Si lo haces bien, todo encaja. Si lo haces mal… acabas en el suelo.
Y en Mallorca, donde el mercado es una jungla y las casas vuelan, no puedes permitirte errores.
Si vendes demasiado rápido, te quedas sin casa y te toca pagar un alquiler desorbitado mientras buscas.
Si tardas demasiado, la casa que querías desaparece y te quedas atrapado en la que intentabas dejar.
Si te equivocas con la financiación, puedes verte sin hipoteca y sin opciones.
1. Creen que pueden vender tranquilos y encontrar otra sin problema
Hasta que se dan cuenta de que la casa que querían ya no está y se quedan con lo que queda.
2. Venden sin haber asegurado la hipoteca de la nueva casa
El banco empieza con mil trabas y al final terminan pagando un alquiler mientras buscan.
3. No calculan bien los plazos
Su casa se vende más rápido de lo esperado y se ven viviendo en un trastero con las maletas y el perro.
Vendí mi casa en Palma porque una inmobiliaria me dijo que encontraría otra rápido.
Tres semanas después, mi casa ya tenía nuevos dueños, pero yo seguía sin encontrar la mía.
Resultado:
Pagué un alquiler el doble de caro de lo esperado.
Metí todos mis muebles en un trastero.
Me pasé meses viviendo en casa de mi hermana con dos maletas y mi perro.
Y cuando por fin encontré algo… lo compré por desesperación, no porque realmente me gustara.
Todo porque nadie me explicó cómo vender y comprar al mismo tiempo sin quedarme en la calle.
👉 Depende del mercado, pero con la estrategia correcta, nuestros clientes suelen vender en menos de 60 días.
👉 No hay una única respuesta. Depende de tu situación financiera, pero te ayudamos a hacer que todo encaje sin riesgos.
👉 Lo gestionamos con tu banco desde el principio para que no haya imprevistos.